Aqui teneis una entrevista de Mendi que salió el día 12 en un periodico valenciano Gaizka Mendieta jugador del middlesbrough “Nunca me arrepentí de dejar el Valencia” El futbolista lleva dos meses de trabajo de recuperación tras ser intervenido del pie izquierdoy espera estar en condiciones de iniciar la próxima temporada en el equipo inglés JOAQUÍN BALLESTA/ VALENCIA
Dos meses en Valencia, intervención en el pie izquierdo y recuperación. El objetivo, ¿estar listo para la pretemporada?
-–Sí, la idea es estar totalmente bien para empezar con el equipo el próximo día 8.
–Lleva tres años en el Middlesbrough y le quedan dos más, ¿qué tal la vida en Inglaterra?
–Bastante diferente a como estamos acostumbrados aquí, es otro concepto de vida, otro ritmo, en todo; desde horarios hasta las comidas. Pero me adapté muy bien desde que llegué.
–Lo peor sería al principio.
–Un poco, porque ves que se come a las doce del mediodía, a las cuatro y media o las cinco está todo cerrado, se cena a las seis de la tarde, pero cuando vas a otro país lo primordial es seguir su ritmo de vida.
–¿Y su mujer y las niñas?
–A ellas siempre les cuesta un poco más porque tienen menos contacto con la gente. Pero pasado un tiempo se adaptaron también muy bien. Ahora, después de tres años, aquello es nuestra segunda casa, tenemos amigos, gente que te ayuda y que te hace sentirte a gusto.
–Entre las ventajas, conocer otra forma de vida, otras costumbres y otro idioma.
–Sí, es importante. Es otra cultura y ayuda a enriquecer a la persona. Las niñas, con cuatro y cinco años, hablan perfectamente inglés y, con dos años más que vamos a estar allí, lo mantendrán para siempre.
–¿Se considera un padrazo?
–La verdad es que me gusta mucho estar con las niñas. Pasamos el mayor tiempo posible juntos.
–¿Cómo es un día en la vida de Mendieta?
–Por la mañana es similar porque entrenamos a la misma hora, a las diez y media. Cambia que, al terminar, aunque no es obligatorio, la mayoría nos quedamos a comer allí. Después voy a recoger a las niñas al colegio y damos un paseo o vamos a casa. Lo que alargamos más es la cena, sobre las nueve, salvo que te hayan invitado en algún sitio o vengan amigos a casa y entonces cenas a las seis y media o las siete.
–Y de fútbol, ¿qué me dice?
–Estoy contento, porque son ya tres años que han sido bastante buenos. El primero ganamos la Copa, el pasado quedamos séptimos y entramos directamente en la Copa de la UEFA y este jugamos la final.
–¿Qué pasó frente al Sevilla?
–Aguantamos bien el primer tiempo y el inicio del segundo, pero con el segundo gol el equipo se vino abajo y el Sevilla jugó a sus anchas. Es una pena llegar a una final y que quede un 4-0 cuando el partido no fue para eso, aunque el Sevilla fue mejor.
–La sensación que se transmite es que en el Middlesbrough no tienen demasiada presión.
Dos meses en Valencia, intervención en el pie izquierdo y recuperación. El objetivo, ¿estar listo para la pretemporada?
-–Sí, la idea es estar totalmente bien para empezar con el equipo el próximo día 8.
–Lleva tres años en el Middlesbrough y le quedan dos más, ¿qué tal la vida en Inglaterra?
–Bastante diferente a como estamos acostumbrados aquí, es otro concepto de vida, otro ritmo, en todo; desde horarios hasta las comidas. Pero me adapté muy bien desde que llegué.
–Lo peor sería al principio.
–Un poco, porque ves que se come a las doce del mediodía, a las cuatro y media o las cinco está todo cerrado, se cena a las seis de la tarde, pero cuando vas a otro país lo primordial es seguir su ritmo de vida.
–¿Y su mujer y las niñas?
–A ellas siempre les cuesta un poco más porque tienen menos contacto con la gente. Pero pasado un tiempo se adaptaron también muy bien. Ahora, después de tres años, aquello es nuestra segunda casa, tenemos amigos, gente que te ayuda y que te hace sentirte a gusto.
–Entre las ventajas, conocer otra forma de vida, otras costumbres y otro idioma.
–Sí, es importante. Es otra cultura y ayuda a enriquecer a la persona. Las niñas, con cuatro y cinco años, hablan perfectamente inglés y, con dos años más que vamos a estar allí, lo mantendrán para siempre.
–¿Se considera un padrazo?
–La verdad es que me gusta mucho estar con las niñas. Pasamos el mayor tiempo posible juntos.
–¿Cómo es un día en la vida de Mendieta?
–Por la mañana es similar porque entrenamos a la misma hora, a las diez y media. Cambia que, al terminar, aunque no es obligatorio, la mayoría nos quedamos a comer allí. Después voy a recoger a las niñas al colegio y damos un paseo o vamos a casa. Lo que alargamos más es la cena, sobre las nueve, salvo que te hayan invitado en algún sitio o vengan amigos a casa y entonces cenas a las seis y media o las siete.
–Y de fútbol, ¿qué me dice?
–Estoy contento, porque son ya tres años que han sido bastante buenos. El primero ganamos la Copa, el pasado quedamos séptimos y entramos directamente en la Copa de la UEFA y este jugamos la final.
–¿Qué pasó frente al Sevilla?
–Aguantamos bien el primer tiempo y el inicio del segundo, pero con el segundo gol el equipo se vino abajo y el Sevilla jugó a sus anchas. Es una pena llegar a una final y que quede un 4-0 cuando el partido no fue para eso, aunque el Sevilla fue mejor.
–La sensación que se transmite es que en el Middlesbrough no tienen demasiada presión.